Bueno, pues ya está aquí. El Galaxy S5 Active (SM-G870), teléfono que ha estado implicado en multitud de filtraciones y rumores últimamente, ha asomado la cabeza por GFXBench, revelando algunas de sus especificaciones. Según GFXBench, el S5 Active contará con pantalla FullHD de 5.2 pulgadas (que posiblemente sean 5.1 ya que el S5 también aparece en la base de datos de GFXBench con 5.2 pulgadas). Igual que sucediera el año pasado con el S4 Active, la pantalla no será AMOLED sino un panel LCD. Bajo el capó encontramos más pruebas de que el teléfono ha visto sensiblemente recortadas sus prestaciones respecto al S5, y es que contaremos con un procesador Snapdragon 800 en lugar del 801 que mueve al buque insignia de la firma, lo que tampoco debería significar cambios alarmantemente relevantes en el rendimiento del teléfono.
El resto de especificaciones del Galaxy S5 Active incluyen 2GB de RAM, cámara trasera de 16MP y frontal de 2MP, 16GB de almacenamiento y Android 4.4.2. Como véis todas calcadas con respecto al S5. Por supuesto que estos nuevos datos nos llevan a la pregunta que hemos venido haciéndonos desde que se conociera la existencia del dispositivo ¿Es necesaria una versión Active cuando el S5 ya cuenta con resistencia a polvo y agua? No tendremos respuesta hasta que suceda la presentación oficial del dispositivo, pero es muy posible que Samsung quiera diferenciar a este terminal dotándole de todavía más altas prestaciones en el campo de la resistencia a estos agentes, probablemente pasando por un diseño más robusto.
El terminal fue certificado por la FCC norteamericana hace poco, por lo que es muy posible que su anuncio esté cercano en el tiempo. El 12 de junio Samsung presentará en Nueva York las Galaxy Tab S, quien sabe si no aprovecharán el evento para dar a conocer el S5 Active. Veremos a ver.
Noticia extraída de
Sammobile
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